El día 29, después de salir de su heya, el Yokozuna Asashoryu se dirigió al aereopuerto de Narita desde donde partió a Mongolia. A pesar del tan deseado regreso, estuvo de mal humor. –¡Ya fue suficiente!- le gritó a un camarógrafo. Lo que le cambió el humor fue ver por televisión un evento de artes marciales mixtas (MMA): -Vi el evento por cable; el UFC es impresionante, Silva y Nogueira cayeron varias veces a la lona- comentó emocionado. Al ver los entrenamientos del arte-marcialista Ishii (la futura esperanza de Japón en el mundo del MMA) presentados en el mismo programa también dijo: -Debo de entrenar mucho más-. Fue revelado que el día 27 Asashoryu habló por teléfono con el peleador Ishii dándole algunos consejos.
Sobre la pregunta sobre qué hará el próximo año para tener un mejor año contestó: -Ya terminé de hablar-, volviendo a su mal humor.