Con el jungyo de verano finalizado tras la exhibición de hoy en Tokio, la caravana del sumo regresa a su rutina habitual a la espera de la publicación en la jornada de mañana del banzuke que regirá para el Aki Basho, el torneo de septiembre que se celebrará en el Kokugikan de Tokio y al que no se sabe aún si podrá acudir el Yokozuna Hakuho, que se ausentó del jungyo el pasado día 25 para ser reevaluado de nuevo de su lesión en el tobillo izquierdo. Tras su regreso el mongol realizó sólo estiramientos y la ceremonia del dohyo-iri, aunque afirmó sentirse mejor.
El que sí se muestra muy optimista sobre su regreso al dohyo es el Yokozuna Kisenosato, a pesar de que aún no ha comenzado a realizar combates serios contra sus rivales. «Mi potencia está de vuelta y si sigo por este camino las dos semanas que quedan hasta el torneo creo que las cosas se pondrán muy interesantes. Estoy entrenando con la sensación de que no puedo permitirme perder y haré todo lo posible por estar el día 1 en plenitud de facultades«.
Por su parte el Ozeki Tochinoshin, que recordemos que será kadoban en septiembre, aún no ha iniciado sus combates de entrenamiento. «Aún no puedo combatir, pero para cuando se publique el banzuke espero poder empezar a realizar ya un entrenamientos serios. Casi no tengo dolores pero me falta confianza. Mi objetivo es conseguir el kachikoshi, no olvideis que estoy en situación de kadoban,» añadió el georgiano.
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