La proliferación de casos de coronavirus que se están registrando en Japón en las últimas semanas está poniendo en jaque a las autoridades niponas, que no descartan imponer medidas más restrictivas para contener al virus.
Varias prefecturas, entre ellas la de Tokio, han solicitado al gobierno central la declaración del estado de emergencia para tratar de contener los contagios. Esto podría afectar de lleno a la disputa del Hatsu Basho, cuyo inicio está previsto para el próximo domingo y que ahora mismo está en grave riesgo de no poder celebrarse.
La Kyokai sigue manteniendo las fechas del torneo, aunque ya se plantea celebrarlo a puerta cerrada. «Dije que intentaremos celebrar el basho incluso sin espectadores pero tendremos que esperar y ver qué deciden las autoridades ya que la situación no es buena. Discutiremos esto en un rijikai especial. No hay manera de que podamos posponer el torneo por dos semanas. Será una decisión difícil de tomar en este momento. Todavía se puede celebrar sin aficionados y también hay otras ideas previstas» dijo Shibatayama oyakata (antiguo Yokozuna Onokuni), encargado de relaciones públicas de la asociación.
Sin embargo ya hay muchas voces que opinan que, al igual que ocurrió el pasado mes de mayo, la declaración del estado de emergencia en la capital japonesa implicaría la inmediata cancelación del torneo. Habrá que esperar a ver qué decisiones se adoptan por parte del gobierno japonés y lo que se acuerde en la subsiguiente reunión de emergencia de la Kyokai. A tan solo una semana del inicio del torneo las opciones parecen reducirse drásticamente.