El Maegashira Endo, que se unió al sumo profesional hace apenas un año como Makushita 10 Tsukedashi (al haber sido campeón universitario) y que ha ascendido rápidamente en el banzuke hasta probablemente situarse en marzo en los primeros rangos de Maegashira, se está convirtiendo en el nuevo ídolo de los aficionados japoneses que ven en él al mejor luchador de futuro para optar a destronar a los mongoles que actualmente copan la zona alta de la clasificación. La prueba de ello es el recibimiento que tuvo en el aeropuerto de la Prefectura de Ishikawa tras volver unos días a su casa aprovechando la semana de descanso que los rikishi tienen después de cada torneo, en donde le esperaban alrededor de 60 personas y miembros de la prensa local, que no pararon de aplaudirle y jalearle tras verle aparecer en la puerta de salida.
Otra prueba más de su creciente popularidad ha sido su nombramiento como embajador del torneo que el próximo 12 de abril se disputará en la ciudad de Maebashi (Prefectura de Gunma), dentro del jungyo de primavera que recorrerá diferentes localidades de la zona central de Japón.
Endo se ha reincorporado ya a la Oitekaze beya para iniciar los entrenamientos y estar en la mejor forma física posible para afrontar el Haru Basho.